Nos encontramos en un tiempo donde nuestro planeta necesita mucho la ayuda de nosotros, ya que nuestro accionar inadecuado frente al planeta hoy por hoy se ve reflejado en los incalculables daños visto en la naturaleza como respuesta al mal uso y trato de recursos que permiten la subsistencia, por no razonar le estamos causando mucho daño a nuestro planeta y dentro de poco estaremos viendo grandes consecuencias.
Aunque sea difícil de creer, las tecnologías de información pueden ayudar a la conservación de nuestro medio como por ejemplo:
Reduciendo el consumo de papel: extractos bancarios, facturas de pago, información publicitaria, trabajos escolares y universitarios entre otros, muchos pueden enviarse a través de Internet y así reduciendo una cantidad considerable de tala de árboles.El uso de Internet con aplicaciones como las TIC y el correo electrónico, disminuye los desplazamientos de personas y de mercancías,esto reduce la utilización de combustible. Por todo esto, un factor clave es asegurar que la tecnología sea apropiada, en todas las aplicaciones donde se use y sobre todo diseñada para fomentar el desarrollo sostenible que elimine la pobreza y al mismo tiempo salvaguardar la tierra.
Problemas medioambientales provocados por las actividades tecnológicas
Las actividades humanas, desde la obtención de una materia prima, hasta el desecho de los residuos generados tras la obtención de un producto tecnológico, pueden tener consecuencias nefastas para la conservación del medio ambiente. Algunos ejemplos son la desertización, el impacto medioambiental de las obras tecnológicas, la contaminación producida en la obtención y tratamiento de muchas materias primas o de fuentes de energía y los residuos generados en muchas actividades industriales.
Impacto ambiental directo. La ejecución de obras públicas (carreteras, pantanos, etc.) y las explotaciones mineras modifican el ecosistema en el que habitan muchas especies animales y vegetales. Estas obras pueden separar las poblaciones de ambos lados de la carretera, vía férrea, etc.
Desertización. Cada año aumenta la superficie desértica del planeta. Esto da lugar a un empobrecimiento general del suelo, lo que perjudica las actividades agrícolas y ganaderas de la región afectada.
Contaminación. Quizá sea el efecto más apreciable. El incremento en el consumo de energía ha hecho que aumenten considerablemente las proporciones de determinados gases (dióxido de carbono, óxidos de azufre, etc.) en la atmósfera, sobre todo cerca de las áreas industrializadas. Algunas consecuencias de la contaminación del aire son el calentamiento global del planeta debido al efecto invernadero o la disminución en el grosor de la capa de ozono.
Generación de residuos. Determinadas actividades tecnológicas generan residuos muy
contaminantes que resultan difíciles de eliminar, como algunos materiales plásticos o los residuos nucleares.
Los accidentes de petroleros tienen unas consecuencias nefastas para el entorno marino en el que tienen lugar. Las mareas negras producidas pueden dañar considerablemente a las
poblaciones de peces, aves marinas, etc., de la región afectada.
Nano sensores para economizar agua. Un grupo de científicos trabaja en el desarrollo de sensores muy pequeños, invisibles a los ojos, peros capaces de medir las vibraciones en las salidas de agua. Gracias ellos, en menos de cinco años, se podrá llevar el control del agua que sale de los grandes almacenes, así como de las pequeñas fugas.
Autopistas inteligentes. Sensores instalados en las autopistas de California actualmente son capaces de brindar un panorama exacto y en tiempo real sobre las condiciones del tráfico. Estas indicaciones permiten a cada conductor economizar una pequeña cantidad de combustible que, aunada a la que ahorra el resto de los automóviles, se vuelve significativa.
Paneles solares flexibles y delgados como una hoja de papel. Google, junto a otras empresas, está desarrollando estos módulos tan estrechos y maleables que dentro de poco podrán colocarse en cualquier ventana, incluso encima de un automóvil o un cuaderno.
Servidores informáticos en costas. Se estima que el 1.5% del consumo energético de un país se va en alimentar a los servidores de Internet. Por ello, algunas de las empresas más grandes de este rubro están buscando utilizar energías renovables para abastecerse, en particular la de las mareas.
Lanzar hierro al océano para que el dióxido de carbono pueda ser absorbido. Éste favorecerá el crecimiento de fitoplancton que tiene la capacidad de absorber el dióxido de carbono. El proyecto ha sido sugerido por un organismo privado y requiere la aprobación de las instituciones públicas del cuidado de los mares.
Producir energía a partir de volcanes. Es todavía algo lejano. La idea es colocar al interior de los volcanes enzimas capaces de producir energía a partir de la biomasa. Es indispensable que haya celulosa en los volcanes y así ésta podría ser convertida en etanol.
Electrodomésticos conectados a Internet. Esto permitirá eficientar el consumo energético de los hogares. Al estar conectados a la red, los aparatos indicarán a sus dueños exactamente cuánta energía consumen, en qué momento y cómo puede reducirse ese gasto.
Globos para captar energía solar. Un proyecto estadounidense planea lanzar al cielo aerostatos capaces de absorberla, mediante un recubrimiento especial y de transmitirla a Tierra a través de cables.
Satélites recolectores de energía solar. Existe un proyecto de la NASA para lanzar al espacio, de aquí a 2016, satélites con paneles solares que podrían recolectar mucha más energía solar que la que es posible captar desde la Tierra. Después, ésta sería transmitida a una estación espacial para su uso o retransmisión a la Tierra.
Electrodomésticos conectados a Internet. Esto permitirá eficientar el consumo energético de los hogares. Al estar conectados a la red, los aparatos indicarán a sus dueños exactamente cuánta energía consumen, en qué momento y cómo puede reducirse ese gasto.
Globos para captar energía solar. Un proyecto estadounidense planea lanzar al cielo aerostatos capaces de absorberla, mediante un recubrimiento especial y de transmitirla a Tierra a través de cables.
Satélites recolectores de energía solar. Existe un proyecto de la NASA para lanzar al espacio, de aquí a 2016, satélites con paneles solares que podrían recolectar mucha más energía solar que la que es posible captar desde la Tierra. Después, ésta sería transmitida a una estación espacial para su uso o retransmisión a la Tierra.
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